sábado, 13 de noviembre de 2010

Desastre


Hace poco acompañe a Hector a Cabranes, con indignación pude contemplar unos árboles cortados y abandonados en ese mismo lugar, madera pudriéndose sin provecho alguno, robles y abedules yacían por el suelo...

No hay comentarios:

Publicar un comentario